Una flaca guarra en una fea y sucia litera
La flaca vuelve al lugar donde tuvieron lugar sus primeras convivencias. Allí donde se masturbó por primera vez. No puede evitar rememorar aquellos momentos así que... Oh! que ven mis ojos! Es un nabo de plástico! Ven aquí majo, que te voy a dejar bien húmedo. Y frota que te frota, vuelve a correrse como lo hizo hace 10 años.